LOS HEDIONDOS QUE FUERON impulsados y consentidos en municipios del Valle de las Salinas, en un corredor naranja, ahora se sienten traicionados.
Tal como lo adelantamos, los ataques a policías aparecieron y lo más seguro es que los objetivos de los maleantes se eleven en nivel jerárquico.
Ya atacaron a un secretario de Seguridad... pero no van a detenerse ahí.
Los informes de Inteligencia señalan que los alcaldes corren peligro y que no hay escolta que los mantenga a salvo.
PERO ESTA VIOLENCIA QUE BRINCA de un lado a otro, toca las zonas en las que se abrió la puerta al cártel invasor y luego ante el ataque de los golfos que retomaron espacios, dejaron solos a los invasores.
Así van de Las Salinas a Linares, a la zona que abarca Terán y su vecindad con Montemorelos.
En toda esa zona el riesgo para las autoridades se acrecienta.