Sábado de Anecdotario

El Congreso del Estado tenía sede en el Palacio de Gobierno, ala suroeste... era fácil acudir a las sesiones como espectador.

El PRI era mayoría super absoluta hasta que la creación de los plurinominales permitió la llegada de los primeros panistas.

Obvio, solo tenían derecho de subir a la tribuna a disentir, pero nunca ganaban una elección, sus propuestas nunca pasaban.

Sus puntos de vista ni siquiera se discutían, era como si no existieran.

Hasta que doña Consuelo Botello tuvo una genial idea, como panista subió en asuntos generales la propuesta de que se declarase a don Alfonso Martínez Domínguez como el mejor gobernador en la historia de Nuevo León.

Los priístas se miraron unos a otros... ¿serían capaces de rechazar una propuesta tal?

Reunión inmediata de la bancada priísta, manotazos... se eleva la voz, se bajaba.

Al final...

"Lamentamos informar que al concluir el tiempo de la sesión ya no es posible llevar a votación este asunto que por su importancia será reprogramado".

Amilcar Aguilar, priísta, se le acerca a doña Chelo...

"¡Qué lista nos salió! por poco y caemos"

Doña Chelo pone cara de no entender.

"No se haga... si llegamos a votar a favor, quedaría grabado que fue a propuesta del PAN y quedamos mal con don Alfonso, y peor... ¡Nos quemamos con el que viene!".